La jornada parece terminar,
el tiempo llega a su fin, es el
momento de dejar atrás lo iniciado.
Es el nuevo amanecer, incierto
se asoma, el Sol no nace,
nazco yo a él.
Con dolor en el pecho,
con el alma herida decir
adiós es morir.
No muero, nazco de nuevo,
dejo lo que no quiero dejar
camino por donde no deseo.
El ascenso es empinado
lleno de piedras que rasgan
mis pies, lleno de espinas
que me hieren.
Cicatrices que sanan pero
dejan su huella en mi, un
corazón duro, curtido al calor
del Sol.
No quiero terminar, quiero
continuar, no quiero finalizar
quiero iniciar.