Te enojas y gritas, yo me enojo y grito,
todos enojados gritando, el caos reinando,
con las armas en la mano, nos herimos,
nos dañamos.
Lloramos, el alma se desgarra, el corazón
sangra, lloramos y todos perdemos, cada
día, cada instante, cada segundo, nos
alejamos más y más.
Y luego, pasa la tormenta, el daño queda
hecho, las heridas abiertas, las heridas
se infectan.
No olvides, que te amo, no
olvides que tu vida me importa
no importa si te enojas, si te
desesperas.
Si te enojas, yo sufro, si me enojo
tu sufres. Dejemos el dolor, dejemos
el sufrimiento.
Abramos los abrazos, unamos
nuestros pechos, cerremos la
brecha.