Escribir sobre la muerte genera muchas controversias y sentimientos encontrados. Algunas personas evitan del todo cualquier referencia a a la muerte porque le temen, no les agrada, le huyen. Por el contrario otras personas buscan a la muerte, siguen sus pasos por donde quiera que esta se encuentra.
Es indudable que la muerte es parte de la vida, no puede haber una sin otra, de hecho una frase que me gusta mucho es "...desde que nacemos nos estamos muriendo...", encierra una gran verdad, todos nacemos para morir y al dar nuestro primer suspiro iniciamos una carrera contra el reloj que tarde o temprano termina en nuestro des ceso.
Yo particularmente he aprendido a temerle cada vez menos a la muerte, no me quiero morir ya y no la busco y evito provocarla, pero estoy claro y consciente de que puede llegar en cualquier momento, para mi, para mi familia, para mis amigos. Este tipo de pensamiento me ha llevado a buscar vivir al máximo cada instante, a sacarle al jugo de la vida el mayor provecho posible.
Al fin de cuentas según la fe que uno pueda profesar, la muerte es solo el inicio de otra gran aventura, es dejar un plano de existencia e ingresar a otro lo cual nos dará nuevas oportunidades.
No hay que temerle, porque siempre llegará, no hay que buscarla porque todo tiene un momento establecido para ser, simplemente hay que entenderla, ella esta dentro de cada uno de nosotros, pero no para acabar con nuestra existencia, sino para recordarnos que debemos vivir la vida, con intensidad, con aprecio por cada maravilla que aun posee el mundo.