lunes, 31 de mayo de 2010

Deja.....

Deja de perseguirme, cada noche

en mi mente te apareces, cada noche de luna llena

en las estrellas cabalgas.


Deja de regresar a mis recuerdos,

no te quiero cerca, vete te lo pido,

vete te lo ruego.


Deja de rasgar sobre la herida que

dejaste, que te permití hacer,

te pido que te alejes, te pido

que mueras para mi.


Deja de ser aquello que duele,

eres hoy aquello que no quiero,

no asaltes mis sueños.


Deja de estar furtiva, oculta en tu

falso manto de inocencia, de benevolencia,

sigue tu andar, deja mi camino,

que solo lo caminare.


Nada más recuerdame de vez

en cuando que tengo que olvidarte.


viernes, 14 de mayo de 2010

¿Qué es el vacío?

Muchas veces hemos definido el vacío como la ausencia del todo o la presencia de la nada. Los religiosos definen el vacío como la ausencia del ser supremo en el que creen.


Los físicos lo hacen indicando la ausencia de aire, de materia. En fin cada persona define el vacío de una forma u otra.


Yo pienso que el vacío es una sensación interna que en algún momento de nuestras vidas experimentamos, cuando nos sentimos más grandes por dentro que por fuera. Al cerrera los ojos nos vemos al borde de un abismo con un fin no visible.


Ese vacío personal nos acompaña mientras estudiamos, conducimos, mientras trabajamos, mientras vivimos y su presencia es latente en cada momento.


A veces el vacío lo sentimos como una presencia extraña que no podemos describir ya que es difusa y abstracta pero sabemos que esta allí.


A diferencia de la soledad, el vacío suele ser cruel y doloroso e incontrolable y no podemos eliminarlo mientras no se sepa que lo causa.


Muchas veces lo queremos llenar con actividades, con objetos e incluso con personas, pero nada de eso logra llenarnos.


La única forma de llenar ese vacío, de dejarlo a un lado es conocernos a nosotros mismos, saber quienes somos, de donde venimos y hacia donde queremos ir. Solo de esa forma podremos saber que es lo que necesitamos.

martes, 4 de mayo de 2010

Aquellos ojos

Aquellos ojos de verde puro,

cristalino y maravilloso lago

de belleza al alma.


Aquellos ojos poseedores

de un alma virgen, sin

daño alguno.


En aquellos ojos me

perdí una vez, en ellos

quise morir.


Aquellos ojos que quise

me miraran, miraban a

otro lado.


Aquellos ojos verdes,

como el musgo, por mi

no lloraron, por mi

no sonrieron.


Aquellos ojos, esmeraldas

hermosas llenas de vida,

llenas de pasión.


Aquellos ojos nuevos del ayer,

¿qué será de ellos?

De mi vista se perdieron


Aquellos ojos que deje partir

no fue su vista para mi,

no fue su mirada mi destino.


Aquellos ojos que alguna vez

quise, que alguna vez soñé.