martes, 1 de septiembre de 2009

Creces

Creces hijo mio, creces sangre de mi sangre,
te veo volar, alto como el cóndor.

Creces hijo mio, creces como un roble,
fuerte, lleno de vida, lleno de sueños y esperanzas.

Formas tu propia vida, forjas tu destino,
sigues el camino que te trazas día a día.

Te alejas de mi, con alegre tristeza te veo caminar,
con dolor de corazón me alegro por verte, te extraño desde ahora.

Creces hijo mio, te he guiado, te he alimentado,
te sigo amando y cada día te amo mas.

Llevas contigo mis palabras, nuestras noches,
llevas mis besos, nuestros abrazos.

Te veo convertirte en un hombre,
de bien, de fe y de esperanza.